
Deslizamientos de terreno y fuertes golpes de agua han sido los principales factores por los que el primer ministro de Dominica, Roosevelt Skerrit, pidió a la ciudadanía, a través de una emisión radial, prudencia y a mantenerse dentro de sus casas hasta la mejora de las condiciones meteorológicas. De acuerdo a un informe preliminar de la Organización para el Manejo de Desastres de Antigua y Barbuda, la población de Dominica quedó sin electricidad tras la caída de fuertes aguaceros.
El Departamento de Manejo de Desastres del territorio caribeño informó en su página, en la red social Facebook, que los aeropuertos Douglas Charles y Canefield, quedaron sumergidos bajo el agua. Se indicó que en la capital, Roseau, drenajes y puentes fueron bloqueados por la caída de árboles. Igualmente el río Pichelin, al sureste de la isla, se salió de su cauce y ha alcanzado varias carreteras aledañas.
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