Con la llegada de un niño al mundo crecen las responsabilidades y cuando además sumamos mascotas el desafío es aún mayor. Pero si eres de los afortunados que deciden hacerlo, los beneficios para los niños serán muy interesantes. Aquí te contamos un poco sobre el tema.
Tienen un compañero
Los animales domésticos, especialmente los perros y los gatos, pueden ser de gran ayuda para tu hijo. Dicen que la escuela es el pilar fundamental para que los niños aprendan a socializar y compartir, pero a veces ese aprendizaje empieza en el hogar. Con una mascota se sentirá acompañado y cuidado, puede jugar y entretenerse y aprender a compartir tiempo y espacio con otro ser. Tener a un animal en la casa va a marcar una gran diferencia en su vida.
Aprenden responsabilidades
El animal que esté en tu casa es un compañero y una responsabilidad más, ¿no te parece? Los niños, gracias a su presencia, aprenderán que tienen que alimentarlo, bañarlo, pasearlo y cuidarlo como si fuera una persona más. Depende de la edad, es una gran ayuda para enseñarle a cuidar al otro y a ocuparse en lo que pueda. Esta es una gran oportunidad para convertir una responsabilidad en algo lúdico y divertido. ¿Qué mejor que enseñarle a un niño a que haga algo al mismo tiempo que los disfruta?
Fomentan la empatía
El vínculo con un animal es considerado por muchísimos profesionales como el primer vínculo empático que tendrá un niño más allá de su propia familia. Con la presencia de una mascota en tu casa ayudas a que tu hijo establezca un lazo con el animal y se preocupe por él. Dónde está y cómo está son preguntas que se empezará a hacer el más pequeño y muestran una temprana preocupación hacia el otro. Todas estas emociones son muy importantes para la formación del carácter y la personalidad de cualquier persona.
Fuente: donfelixspm.com
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