Santo Domingo.- A una semana y días de iniciarse el año escolar diversas escuelas aún esperan libros, uniformes y zapatos para sus estudiantes, lo que obliga a estos a compartir textos en aulas y a los padres a enviar a sus vástagos con pantalones y calzados rotos en algunos casos, como en la escuela Café con Leche, de Herrera.A pesar de las inversiones en el sector educativo, diversos centros de jornada extendida se las ingenian para suplir de talleristas y maestros de música y otras clases extracurriculares.
En ocasiones dependen de un maestro para impartir la enseñanza de un día completo en casi la totalidad de la escuela.
Esta última situación se da en el Centro de Excelencia República de Colombia, que, si bien es cierto, es de los pocos planteles donde se imparte música en varias temáticas, sólo cuentan con uno o dos profesionales que abarcan relativamente casi todos los niveles. Entre los centros que no han recibido los libros de Ciencias Naturales, Lengua Española y Matemáticas figuran la escuela básica Pitucas Flores, en Las Cañitas, y República de Haití, en el ensanche Luperón.
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