El consumo de bebidas alcohólicas artesanales y de baja calidad se incrementó en forma descomunal en el país, casi al unísono con la pandemia de covid-19, al igual que los puestos de elaboración de esta bebida elaborada sin procesos adecuados de destilación.
La mayoría de los puestos localizados estaban en el Gran Santo Domingo y provincias cercanas, pero han localizado fábricas de producción de clerén en la zona fronteriza.
“La tasa de letalidad es extraordinariamente alta”, dijo el ministro de Salud e insistió en que se trata de una bebida de uso muy popular, estaba contaminado con metanol, un alcohol de alta toxicidad.
El Ministerio de Salud Pública, junto a la Policía, continúa realizando operativos para localizar los centros de producción de clerén. La intoxicación por esta bebida se convierte en cíclico, pero es la primera vez que la letalidad es tan alta.
El clerén es un destilado de producción artesanal y clandestina, que se puede contaminar con metanol debido al proceso de producción, suele ocurrir que el fabricante mezcla disolventes para abaratar costos
Las primeras muertes por consumo de esta bebida ilegal se produjeron en el sector Brisas del Este, en Santo Domingo Este, el pasado 7 de abril.
Fuente: hoydigital.com.do
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